Master en Comunicación y Educación en la Red - Subprograma de Investigación en e-Learning

jueves, 23 de mayo de 2013

¿Cuáles eran nuestras redes sociales hace años?



Hace no tantos años no teníamos móvil, ni portátil, ni Internet... y sin embargo no lo echábamos en falta... Igualmente, no disponíamos de las posibilidades que nos ofrecen las redes sociales de la Web 2.0 y sin embargo nos relacionábamos socialmente, ¿verdad?. Pero... ¿qué cosas han cambiado desde entonces?, ¿cómo se ha tranformado el modo en que se produce esa relación social?, ¿y en nuestro entorno laboral?...

Antes apenas escribíamos una carta a la semana o al mes, pero ahora mandamos cientos de twitt, escribimos nuestras impresiones en blogs, confiamos nuestros sentimientos y pensamientos en Facebook, redactamos decenas de correos en nuestros trabajos, y consultamos Internet y sus servicios adicionales como una herramienta fundamental de información tanto personal como laboral.
Antes hacíamos fotos cuando íbamos de viaje, en los cumpleaños, en Navidad... y hoy fotografiamos en cualquier momento todo aquello que nos llama la atención con nuestro iPhone o Smartphone, y además lo compartimos inmediatamente en la Red, como muestra de participación colectiva y por estar "presente" en el entorno social.

Sí, seguimos relacionándonos, pero lo hacemos de forma más intensa, más frecuente y con mayor repercusión... llegamos más lejos que antes, llegamos a más personas, somos más populares y por tanto tenemos más posibilidades de enriquecernos y enriquecer a los demás... Y ¿porqué no hacerlo también en nuestro entorno laboral? Sí, en nuestro trabajo también podemos socializar, pero en un sentido diferente, en el sentido de la colaboración, de la participación colectiva, del trabajo en equipo y el enriquecimiento personal y colectivo, sin olvidarnos también de la comunicación e interacción con los usuarios/clientes, ávidos en participación 2.0.

El desarrollo y despliegue de las redes sociales ha modificado el modo en que nos comunicamos y relacionamos, un cambio revolucionario que también afecta al modo en que se produce y se desarrolla la comunicación en la empresa y las relaciones laborales. La incorporación de las posibilidades que ofrece la Web 2.0 al trabajo, -foros, wikis o blogs-, hace que se produzca un cambio en el estilo y modo en que se desarrolla el proceso de comunicación y participación interna y externa, apareciendo la Comunicación 2.0 como una posible ventaja competitiva, como una oportunidad de mejorar la gestión de las relaciones con los trabajadores y el entorno, de mejorar la productividad e incluso el vínculo emocional, a través de las tecnologías colaborativas y en beneficio mutuo.

Si la Web 2.0 está dirigida a los usuarios, la empresa 2.0 está dirigida a los empleados, los clientes y los proveedores y partners. La aplicación de la Web 2.0 y su uso en las organizaciones, ha propiciado un modelo novedoso de empresa basada en las herramientas de la Web 2.0 y en las redes sociales, es decir, aquella empresa que obtiene una mayor colaboración e interacción en su tejido corporativo gracias al uso e integración de las herramientas 2.0... ¿somos nosotros una Biblioteca 2.0?... o mejor dicho, ¿conocemos, aplicamos y explotamos estas posibilidades de Web social en nuestro trabajo?

La incorporación progresiva en el mundo laboral de recién graduados (da igual en qué), jóvenes nativos digitales, duchos en redes sociales, conocedores y usuarios activos de blogs y wikis, expertos en buscar y difundir información en Youtube o Flickr y ávidos de desarrollar su creatividad en el uso de las tecnologías, obligará (sí o sí) a las organizaciones a adaptarse a los cambios que estas generaciones incorporan en su modo de entender el trabajo, en su manera de establecer relaciones laborales y en su necesidad de utilizar la comunicación interna y externa de la empresa.

Si nos ha costado muy poco incorporar a nuestra vida personal el uso y aplicación de herramientas 2.0, ¿no podemos sumarnos a esta transformación en el trabajo, experimentando en nosotros mismos este cambio?... ¿No será mejor adaptar nuestro trabajo y el modo en que trabajamos para que los empleadores no tengan que buscar fuera lo que existe dentro?... ¿No sería interesante desplegar también en el trabajo nuestro conocimiento y uso de las redes sociales en beneficio mutuo?...

Nuestros usuarios, (y nuestros superiores), esperan que nosotros estemos a la altura, hablemos su mismo lenguaje, compartamos y colaboremos con ellos en igualdad de condiciones... y para ello, debemos adaptarnos, debemos flexibilizar nuestro aprendizaje, debemos desarrollar estas habilidades y competencias, debemos reinventarnos y, en definitiva, transformarnos para sobrevivir.

Éstas son reflexiones personales, pero si a alguno le sirven de algún modo para iniciar su propia reflexión, me doy por satisfecho.

(A continuación, comparto con vosotros un mapa de Redes Sociales bastante actual)